Después de meses, en qué activistas denunciaron las precarias condiciones y el frío que pasaba en un parque de Ciudad Juárez, en el estado de Chihuahua, la jirafa Benito ha llegado a Puebla.
Esta madrugada, el ejemplar llegó a África Safari, luego que desde el domingo por la noche comenzó su viaje.
“Lo vemos en muy buen estado, está muy curioso por todos los olores, por las cosas nuevas que hay aquí, ya comió un poco, ya tomó agua” informó el director del parque de conservación, Frank Camacho.
Se prevé que hoy y mañana 24 de enero, permanezca en resguardo para después ser integrado con los otros ejemplares de este parque.
Es importante mencionar que esta lucha por el traslado de Benito duró más de ocho meses, pues los activistas denunciaron que la jirafa estaba sufriendo temperaturas extremas y falta de cuidados especializados en Chihuahua, y aunque se hicieron múltiples llamados de atención hacia la gobernadora, Maru Campos y a Blanca Mendoza, quien es procuradora de la Profepa, fue muy difícil que dieran la atención requerida a este caso.
Gracias a la presión que se ejerció por parte de los medios de comunicación, este caso hizo el suficiente ruido para ser atendido.
El mismo colectivo que promovió una mejor calidad de vida para la jirafa. Ahora está volteando el foco hacia la elefanta Ely, quién se encuentra en el zoológico de Aragón, pues fue rescatada de un circo en el 2012 y ya padece múltiples enfermedades crónicas.
Ely tiene 37 años y lleva seis viviendo en aislamiento, lo que es contraindicado a esta especie, pues las condiciones en las que se encuentra hace que tenga una muy mala calidad de vida ya que no se garantiza su salud física en su hábitat, pues tiene el 80% de concreto, y ninguna modificación al recinto podría reparar el daño que tiene por aislamiento, lo que perjudica a su salud mental.
Anteriormente se ha dado a conocer que los zoológicos de la Ciudad de México, están perdiendo diversas especies de las que no han informado de manera clara, pero que sí han logrado cobrar los pagos de los seguros, sin haber transparentado adonde o en qué se gastaron esos montos.
Por eso es urgente seguir haciendo presión para que la historia de Ely tenga un final similar a la de Benito, pues existe la opción de que la elefanta sea enviada a un santuario en Brasil, en donde contaría con todos los gastos cubiertos, pero al momento la fiscalía y el gobierno capitalino se han negado a dejar que esto suceda, pues alegan que el ejemplar vive en buenas condiciones, aunque las imágenes muestran todo lo contrario.