Se cumplió el sueño rojinegro, después de seis meses se convirtieron en bicampeón y se coronaron en el estadio Hidalgo después de un marcador global a 2- 3 en el marcador global contra Pachuca.
Los zorros no la tuvieron fácil pero lograron repetir el título y alcanzar a Pumas y León, que son los únicos equipos bicampeones en los torneos cortos.
Fue Romario Ibarra el responsable de abrir el marcador en el partido de vuelta, apenas en el minuto siete y quitó la primera piedra del camino para cruzar el esférico al poste más lejano de Camilo Vargas que poco pudo hacer.
Los locales insistieron pero salió contraproducente porque el VAR fue consultado y una vez más Atlas obtuvo un penal a su favor y Julio Furch le dio el equilibrio al marcador para recuperar la ventaja.
Aunque los Tuzos no se desanimaron y aprovecharon la ventaja de estar en casa, supieron recortar la distancia gracias a un cabezazo de Nicolás Ibañez justo cuando el árbitro estaba a punto de señalar el final del primer tiempo.
Para el segundo tiempo, Diego Cocca ordenó al equipo y su estrategia para equilibrar las acciones siendo más cauteloso a la hora de ir al ataque; el efecto fue positivo para la causa rojinegra ya que los Tuzos dejaron de ser peligrosos.
Por un momento parecía que el juego no avanzaba pero con la expulsión de Anibal Chalá los de la bella airosa reaccionaron y volvieron a arrinconar a su rival, pero el tiempo ya era su peor enemigo y ya no les alcanzó.