En los últimos años, se ha hecho mucho hincapié en la salud mental, luego de la pandemia de COVID-19, el aislamiento nos llevó a hablar un poco más de este tema y la importancia de atenderlo.
Una de las prácticas que ha crecido es la respiración holotrópica, pues se ha demostrado que gracias a ella existen mejorías en la salud física, mental y emocional, ya que se puede trabajar en traumas emocionales profundos.
El Breathwork como es mejor conocido, es un conjunto de ejercicios de respiración que van mucho más allá de la respiración que normalmente tenemos en la vida cotidiana, pues utiliza patrones específicos de inhalación y exhalación que impactan directamente en el sistema nervioso y en las emociones.
Con ello, podemos activar el sistema nervioso parasimpático, que tiene la función de relajar y restaurar el cuerpo. Cuando cambiamos el ritmo y la profundidad de la respiración entramos en un estado de calma y eso afecta en los niveles de estrés y ansiedad. Por lo que también influye en la química cerebral, pues con el flujo de oxígeno afectamos al cerebro y al sistema nervioso y reducimos la fatiga mental.
Es importante mencionar que esta técnica no tiene nada que ver con el Pranayama que se utiliza en yoga, sino que a través de estos ejercicios, impactamos de manera profunda al sistema nervioso simpático, que es el encargado de preparar el cuerpo para situaciones de estrés o peligro.
Te compartimos cinco datos interesantes sobre esta técnica:
- Reduce el estrés
- Fomenta la creatividad
- Mejora la concentración porque aumenta el flujo de oxígeno al cerebro
- Incrementa la energía de tu cuerpo, porque también se mejora la oxigenación celular
- Mejora el sueño, pues al liberar la carga de estrés permite que el cuerpo se restaure.